Tulkarem-Saba:
Las fuerzas israelíes continúan su agresión contra la ciudad de Tulkarm y su campamento por 67º día consecutivo, y contra el campamento de Nur Shams por 54º día, en medio de una escalada de operaciones sobre el terreno y refuerzos militares, acompañados de ataques contra civiles palestinos, que resultan en heridos y detenidos.
La Agencia de Noticias Palestina, WAFA, informó que las fuerzas israelíes desplegaron grandes unidades de infantería en los barrios del este y el sur de la ciudad al amanecer del jueves, llevando a cabo extensas búsquedas y redadas en viviendas. Cuatro ciudadanos fueron arrestados, uno de ellos en su casa en el suburbio de Artah, al sur de Tulkarm.
WAFA informó que las fuerzas israelíes han intensificado sus ataques contra la ciudad de Tulkarm y sus dos campamentos, particularmente el campamento de Nour Shams, en medio del férreo asedio actual.
La Media Luna Roja Palestina informó que un ciudadano de 54 años resultó herido tras ser agredido por soldados de ocupación dentro del campamento de Nour Shams. Fue trasladado al hospital para recibir tratamiento.
Esto ocurrió después de que las fuerzas israelíes persiguieran y detuvieran a un grupo de ciudadanos palestinos cuando intentaban regresar a sus hogares en el campamento para recuperar sus pertenencias. Fueron sometidos a interrogatorios y abusos y se les impidió entrar bajo amenazas.
También se dispararon intensamente botes de gas lacrimógeno en varias zonas, incluida la rotonda Mártir Saif Abu Libdeh, el distrito del matadero y la zona del cementerio, en un intento de impedir que los residentes entraran al campamento.
Las fuerzas israelíes siguen imponiendo un asedio sofocante al campo de refugiados de Nour Shams, acompañado de repetidas incursiones de vehículos blindados, excavadoras y unidades de infantería, atacando los barrios de al-Manshiyya y al-Maslakh. También llevan a cabo redadas, actos vandálicos e incendios de viviendas e infraestructuras, además de expulsar a los residentes de sus hogares, especialmente en Jabal al-Nasr y Jabal al-Salihin.
Mientras tanto, después de la medianoche de anoche, las fuerzas enemigas israelíes dispararon bengalas hacia el barrio del aeropuerto en el campo de refugiados de Tulkarm, mientras continúan su asedio y su intenso despliegue en sus barrios. El campamento quedó vacío de sus residentes después de que fueron desplazados por la fuerza de sus hogares, y completamente desprovisto de cualquier señal de vida, tras la destrucción total de su infraestructura y el sabotaje, demolición e incendio de casas e instalaciones.
Como parte de las actuales restricciones al movimiento palestino, las fuerzas israelíes establecieron puestos de control móviles en la calle Nablus, cerca de la mezquita Al-Firdaws, sometiendo los vehículos a inspecciones exhaustivas. Se vieron vehículos militares israelíes moviéndose a gran velocidad entre el barrio de Dhnaba y Jabal al-Nasr en el campo de refugiados de Nour Shams, hasta la calle Nablus, en medio de un intenso uso de sus bocinas.
En los últimos días, las excavadoras israelíes han cerrado tramos de la carretera de Nablus con montículos de tierra en ambas direcciones, tomando simultáneamente varias casas allí y convirtiéndolas en cuarteles militares, con sus vehículos apostados a su alrededor.
La actual agresión israelí contra la ciudad y sus dos campamentos ha causado la muerte de 13 civiles palestinos, entre ellos un niño y dos mujeres, una de las cuales estaba embarazada de ocho meses. También decenas de personas han resultado heridas y detenidas, y más de 4.000 familias han sido desplazadas por la fuerza de los campamentos de Tulkarm y Nur Shams, así como decenas de familias del barrio norte de la ciudad después de que sus casas fueran confiscadas y varias de ellas convertidas en cuarteles militares.
También provocó una destrucción generalizada de infraestructura, incluidas viviendas, comercios y vehículos, que fueron total y parcialmente destruidos, quemados, vandalizados, saqueados y robados. En los campos de refugiados de Tulkarm y Nur Shams, 396 casas quedaron completamente destruidas y 2.573 parcialmente destruidas, además de cerrarse sus entradas y callejones con montículos de tierra.
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