Ginebra – Saba:
El Monitor Euromediterráneo de Derechos Humanos afirmó que la horrible masacre perpetrada por el ejército de ocupación israelí esta mañana de jueves contra un gran número de civiles en la ciudad de Deir al-Balah, en el centro de la Franja de Gaza, refleja una política israelí sistemática basada en el uso de la hambruna como arma, seguida del asesinato de civiles que intentan acceder a alimentos.
En un comunicado recibido por la Agencia de Noticias Yemeníta (Saba), el Observatorio consideró este crimen una flagrante violación de todas las normas del derecho internacional humanitario y una consecuencia directa del silencio internacional que ha supuesto el empoderamiento efectivo de los perpetradores.
Se indicó que, aproximadamente a las 7:15 a. m. del jueves, un dron israelí atacó a una multitud de decenas de civiles que esperaban recibir ayuda alimentaria y suplementos para niños frente a la sede de la Fundación. El ataque Human Appeal International, frente al cruce de Al-Tayaran, al norte de la ciudad de Deir al-Balah, en el centro de la Franja de Gaza, causó la muerte de 15 personas, entre ellas 10 niños y 3 mujeres, y heridas a aproximadamente 35 más, la mayoría niños. Fuentes médicas prevén que el número de muertos aumente debido a la presencia de varios niños gravemente heridos. El Monitor Euromediterráneo de Derechos Humanos declaró: «La investigación inicial de campo realizada por el equipo del Monitor Euromediterráneo de Derechos Humanos muestra que el lugar atacado no solo era un punto de distribución de ayuda alimentaria, sino que también incluía varias instituciones humanitarias y médicas, como almacenes del Programa Mundial de Alimentos, un puesto médico y un orfanato llamado "Amigos Sin Fronteras".
Era evidente que decenas de civiles, en particular mujeres y niños, se habían congregado en la zona desde la madrugada con la esperanza de obtener alimentos ante el colapso total de la seguridad alimentaria en la Franja de Gaza».
El Monitor Euromediterráneo señaló que el ejército israelí posee capacidades de vigilancia y reconocimiento, además de sistemas de tiro y puntería altamente sofisticados y precisos, lo que confirma sin lugar a dudas que el ataque aéreo que mató a este gran número de mujeres y niños fue deliberado, directo y planificado. El informe también indicó que el ejército utilizó deliberadamente munición de precisión para causar el mayor número posible de víctimas civiles, un crimen plenamente coherente con el genocidio perpetrado por el ejército israelí en la Franja de Gaza durante más de 21 meses. Explicó que, ante la recurrencia de crímenes similares y la falta de una respuesta internacional responsable, el ejército israelí, en la mayoría de los casos, ha ignorado emitir declaraciones para justificar sus crímenes contra la población civil, ya que no siente presión para procesar, exigir responsabilidades, ni siquiera para cuestionar o protestar por parte de los Estados y organizaciones pertinentes.
Señaló que el crimen contra civiles cometido hoy en Deir al-Balah representa un ejemplo de los ataques israelíes dirigidos directamente contra civiles, especialmente niños y mujeres, en violación de todas las convenciones de derechos humanos y del derecho internacional humanitario.
Enfatizó que este crimen se enmarca en un patrón recurrente y sistemático de ataques israelíes contra centros de distribución de ayuda y concentraciones humanitarias. En menos de dos meses, el Monitor Euromediterráneo de Derechos Humanos documentó la muerte de más de 850 palestinos que intentaban acceder a alimentos, ya sea en colas en los puntos de distribución impuestos por el propio enemigo israelí como parte de su llamado "sistema de coordinación sobre el terreno", en camiones de ayuda, frente a mercados o incluso en "refugios de alimentos" establecidos por los residentes locales para intentar sobrevivir.
El Monitor Euromediterráneo de Derechos Humanos responsabilizó a la comunidad internacional de permitir la continuación y la escalada de los crímenes sistemáticos cometidos por el ejército enemigo israelí contra la población civil hambrienta de la Franja de Gaza.
Hizo hincapié en que la incapacidad de los Estados influyentes para adoptar medidas disuasorias y ejercer una presión real para detener los crímenes de Israel, incluido el funcionamiento continuo de su inhumano mecanismo de distribución de ayuda, proporcionaba una excusa política y práctica para el uso continuo de estos centros como escenarios de asesinatos masivos, alentando asesinatos similares en otros lugares y la implementación de prácticas que violan los derechos más básicos de los palestinos y degradan su dignidad humana.
more of (Internacional) |