Beirut – Saba:
El Secretario General de Hezbolá, Jeque Naim Qassem, afirmó que la resistencia ha sido una fuente de estabilidad para el Líbano, al haber impedido al enemigo israelí llevar a cabo cualquier agresión durante 17 años y frustrado el proyecto de asentamiento israelí en el sur del Líbano, permitiendo que la liberación sustituyera a la ocupación.
En un servicio conmemorativo en memoria del gran líder yihadista Hajj Ali Karaki (Abu al-Fadl Karaki), según el sitio web Al-Manar, Qassem declaró: «Durante 42 años, la resistencia ha acumulado logros cualitativos, en particular la liberación del Líbano y la imposibilidad de que Israel lograra sus objetivos durante la agresión de julio de 2006». Señaló que la resistencia en la batalla de "Oli al-Bas" frustró el intento del enemigo de llegar a Beirut e impidió el avance de 75.000 soldados y oficiales israelíes en la frontera sur.
Enfatizó que la esencia de los logros de la resistencia reside en liberar el territorio, proteger la patria e impedir que la entidad imponga su hegemonía sobre las decisiones y el futuro del pueblo libanés.
Su Eminencia explicó que Hezbolá implementó plenamente el acuerdo de alto el fuego al sur del río Litani y que el Ejército libanés se desplegó donde fue posible.
Declaró: "Nosotros, como Estado libanés, Hezbolá y la resistencia, cumplimos con nuestras obligaciones en virtud del acuerdo, mientras que Israel no hizo nada".
Añadió: "Todas las partes internacionales confirman que Israel cometió más de 3.800 violaciones, mientras que todos reconocen que Hezbolá y el Líbano cumplieron con el acuerdo". El jeque Qassem criticó el intento de Estados Unidos de impulsar un nuevo acuerdo que comenzaría exigiendo el desarme de la resistencia a cambio de retiradas parciales. Explicó que el enviado estadounidense Hochstein era garante del acuerdo, pero ahora, ocho meses después, lo incumple, alegando que no se ofrecieron garantías.
Enfatizó que «la fuerza de la resistencia no se limita a las armas, sino que se basa en la fe y la firmeza, y las armas son simplemente parte del sistema de fuerza de la situación».
El Secretario General de Hezbolá declaró: «Estamos preparados para soportar sacrificios, y si se producen pérdidas importantes, tenemos la esperanza de enfrentarlas, cerrando la puerta al enemigo y abriendo una nueva vía hacia la liberación».
Señaló que el Líbano se enfrenta a tres peligros reales: el enemigo israelí desde el sur, los aliados del ISIS desde el este y la tiranía estadounidense, que busca imponer su tutela sobre el Líbano y obstaculizar su capacidad de vivir y tomar decisiones.
El jeque Qassem declaró: «La cuestión no es el desarme. Más bien, estas armas son el principal obstáculo para la expansión del enemigo y son lo que ha mantenido al Líbano a flote». Instó a los libaneses a ser pacientes con estas armas, que brindan una verdadera protección.
Enfatizó: «Prioricemos la amenaza, y luego estaremos listos para discutir la estrategia nacional de defensa y seguridad».
Añadió: «Sabemos que la confrontación es costosa, pero la rendición nos dejará sin nada. Aprendamos de las experiencias de la región y del mundo». Enfatizó la «plena disposición para participar en una confrontación defensiva si Israel ataca».
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