Gaza - Saba:
La oficina de medios del gobierno en la Franja de Gaza condenó las repetidas amenazas del enemigo sionista contra el hospital Kamal Adwan en el norte de la Franja de Gaza y pidió a la Organización Mundial de la Salud que envíe rápidamente una delegación sobre el terreno para determinar el alcance del crimen, proteger el hospital y equipos médicos y proporcionar corredores seguros.
La oficina indicó anoche en un comunicado que el enemigo amenazó con evacuar, asaltar y bombardear el hospital Kamal Adwan, amenazar la vida del personal sanitario que trabaja en su interior, obligar al personal médico y a los pacientes a evacuarlo y privar a cientos de pacientes y heridos de recibir tratamiento y atención médica.
Destacó que atacar, bombardear y amenazar hospitales y amenazar las vidas de los trabajadores de la salud es un crimen humanitario y moral y una violación flagrante de todas las leyes y normas internacionales que garantizan la protección de las instalaciones de salud y del personal médico en tiempos de guerra.
Advirtió que esta no es la primera vez que el ejército enemigo ha cometido ataques flagrantes contra el Hospital Kamal Adwan, y que estos ataques continúan y no han cesado desde casi 80 días de agresión terrestre contra la gobernación del norte de la Franja de Gaza, que se cobró la vida de miles de mártires, desaparecidos, heridos y detenidos.
Pidió a la Organización Mundial de la Salud que envíe rápidamente una delegación de campo urgente al Hospital Kamal Adwan para determinar el alcance de los crímenes cometidos por el enemigo sionista contra el hospital y contra el personal médico.
También pidió garantizar la protección del hospital y del personal médico y proporcionar corredores seguros para que la ayuda médica y humanitaria llegue al hospital, que se supone debe brindar servicios médicos y atención médica a decenas de miles de civiles.
El "periodista del gobierno" culpó al enemigo sionista, a la administración estadounidense y a los países que participaron en el genocidio. Al igual que Gran Bretaña, Alemania y Francia, tienen plena responsabilidad por la continuación de estos crímenes y violaciones flagrantes y por la continuación del crimen de genocidio.
Hizo un llamado a la comunidad internacional y a las organizaciones internacionales e internacionales a tomar medidas urgentes y efectivas para detener estas repetidas violaciones y garantizar la protección de las instalaciones de salud y los equipos médicos.