Sanaá - Saba:
La Organización Intisaf por los Derechos de las Mujeres y los Niños condenó el asesinato del ciudadano Saif Mahmoud Faraj Al-Sharabi en el barrio de Al-Masbah en la gobernación de Taiz, a manos de un miliciano armado.
En un comunicado, cuya copia ha sido recibida por la agencia de noticias yemení (Saba), la organización denunció el asesinato del ciudadano Al-Sharabi delante de su esposa e hijas en defensa de su honor y dignidad, mientras el asesino aún se encuentra en libertad a pesar de haber transcurrido más de una semana desde el crimen, debido a que los servicios de seguridad no lograron arrestarlo porque se refugiaba con líderes militares.
La declaración condenó este crimen atroz, atroz que es rechazado por la Sharia, la costumbre y la ley, ya que el crimen de amenazar y matar es una grave violación del derecho internacional humanitario, que penaliza atacar a civiles inocentes de cualquier forma.
Señaló que la coalición de agresión encabezada por Estados Unidos, Arabia Saudita y los Emiratos Árabes Unidos continúa cometiendo los crímenes y violaciones más atroces contra el pueblo yemení, y lo que los grupos armados apoyados y motivados por la agresión están cometiendo contra ciudadanos en las áreas bajo su control y los crímenes y violaciones atroces que están practicando contra ellos.
La declaración responsabiliza plenamente a la coalición agresora y a sus mercenarios por los crímenes cometidos contra civiles, ya sea a través de operaciones militares sistemáticas, el asedio asfixiante o el cierre del aeropuerto de Saná, y pide una investigación y responsabilidad penal de los líderes de la coalición y de todos aquellos que se haya comprobado que están involucrados en estos crímenes.
También responsabilizó a las Naciones Unidas y al Consejo de Seguridad por su vergonzoso silencio y elusión de sus deberes, lo que alentó a la coalición saudí a seguir cometiendo más crímenes de guerra contra civiles en Yemen.
La organización pidió a la comunidad internacional, a las organizaciones humanitarias y de derechos humanos y a todas las personas libres del mundo que asuman sus responsabilidades morales y humanitarias de apoyar al pueblo yemení, levantar el asedio, abrir el aeropuerto de Saná y condenar los horrendos crímenes cometidos por Arabia Saudita. coalición y presionar a las Naciones Unidas, específicamente al Consejo de Seguridad, para que cumplan con su deber de proteger a los civiles y detener la guerra y todas las formas de agresión.
Se renovó el llamado a la formación de un comité internacional imparcial para investigar todos los crímenes y masacres cometidos por mercenarios de los países de la coalición contra civiles.