
Pekín - Saba:
Ingenieros de software chinos han desarrollado un sistema de inteligencia artificial completamente autónomo, al que llamaron "Manus", para que sea el primero de su tipo en el mundo en realizar tareas complejas sin intervención humana.
Manus tiene la capacidad de tomar decisiones de forma proactiva, lo que lo diferencia de los chatbots inteligentes, como ChatGPT, Gemini y Grok, que dependen de la participación humana directa.
También puede completar tareas sin esperar instrucciones, como buscar un apartamento en función de factores como las tasas de criminalidad, el clima y las tendencias del mercado, y luego proporcionar automáticamente recomendaciones personalizadas.
El trabajo de Manus no se limita a un único modelo de inteligencia artificial, sino que actúa como un ejecutivo que supervisa varios subsistemas especializados, lo que le permite manejar procesos complejos de varios pasos sin problemas.
También funciona de forma asincrónica, ejecutando tareas en segundo plano y notificando a los usuarios cuando los resultados están disponibles, sin necesidad de un monitoreo constante.
El lanzamiento de Manus representa un salto cualitativo en el campo de la inteligencia artificial, ya que se considera un paso hacia sistemas más autónomos, pero al mismo tiempo plantea interrogantes sobre el futuro de los empleos humanos y la responsabilidad legal.
Manus también cuestiona la noción predominante de que Estados Unidos es el líder absoluto en este campo, ya que indica que China ha superado la etapa de recuperación y ha pasado a la innovación real en el desarrollo de sistemas de inteligencia artificial totalmente autónomos.
El papel de Manus no se limita únicamente al aspecto técnico, sino que se extiende a aplicaciones prácticas, sobre todo en la contratación, donde puede analizar CV, comparar tendencias del mercado laboral y sugerir los mejores candidatos basándose en un análisis en profundidad.
También puede tener un gran impacto en el campo del desarrollo de software, ya que puede crear sitios web integrados, extraer la información necesaria de las redes sociales y resolver problemas técnicos por su cuenta.
Este desarrollo plantea preguntas fundamentales sobre el futuro del empleo, ya que Manus podría representar una amenaza real para los empleos humanos, ya que no solo mejora la eficiencia, sino que puede reemplazar a los empleados en muchos campos.
La cuestión de la responsabilidad legal también sigue sin resolverse: ¿quién será responsable si la inteligencia artificial comete un error costoso? Hasta la fecha, las leyes y regulaciones aún no están preparadas para manejar sistemas de IA totalmente autónomos.