
Londres-Saba:
El Secretario de Asuntos Exteriores británico, David Lammy, pidió una investigación sobre el bombardeo del enemigo israelí a una sede de las Naciones Unidas en la Franja de Gaza, que mató a un empleado extranjero e hirió a otras cinco personas.
Lamy expresó anoche en una publicación en la plataforma “X”, según informó la Agencia de Prensa Quds, su conmoción por el ataque a una sede de las Naciones Unidas en Gaza.
Destacó la necesidad de investigar el incidente de manera transparente, responsabilizar a los responsables y proteger a las Naciones Unidas y a los empleados de las organizaciones humanitarias.
Farhan Haq, portavoz adjunto de Guterres, dijo ayer que "el Secretario General expresó su profunda tristeza y conmoción al enterarse de la muerte de un empleado de la Oficina de las Naciones Unidas de Servicios para Proyectos".
Haq añadió que la muerte se produjo “después de que dos casas de huéspedes de las Naciones Unidas en Deir al-Balah, en el centro de la Franja de Gaza, fueran blanco de ataques aéreos y otros cinco empleados de las Naciones Unidas resultaran gravemente heridos”.
El enemigo israelí reanudó su agresión contra la Franja de Gaza en la madrugada del martes pasado, y el patio del Hospital Bautista de la ciudad de Gaza se llenó de cadáveres de niños y mujeres después de haber sido atacados por aviones de combate mientras dormían en sus casas y en las tiendas de campaña de los desplazados en el norte de la Franja de Gaza, en la mayor violación del frágil acuerdo de alto el fuego concertado con la mediación de Qatar, Egipto y Estados Unidos el pasado mes de enero.
Con el apoyo estadounidense y europeo, las fuerzas enemigas israelíes cometieron genocidio en Gaza entre el 7 de octubre de 2023 y el 19 de enero de 2025, dejando más de 160.000 palestinos martirizados y heridos, la mayoría de ellos niños y mujeres, y más de 14.000 desaparecidos.