Ginebra - Saba:
Médicos Sin Fronteras llamó el miércoles a la necesidad de restablecer inmediatamente la tregua y permitir el paso de electricidad y ayuda humanitaria a Gaza, incluido combustible, suministro de agua y saneamiento, para evitar más pérdidas de vidas.
La organización confirmó, en un comunicado de prensa, que el acceso al agua, la electricidad y el combustible está prohibido en Gaza en medio del colapso de la tregua.
La organización advirtió que el enemigo continúa con uno de sus métodos destructivos de guerra en Gaza, ya que prohíbe efectivamente el acceso al agua cortando la electricidad y el combustible a la Franja, mientras continúa bombardeando la Franja de Gaza, ante el colapso de la tregua y el elevado número de víctimas.
Mientras tanto, Paula Navarro, coordinadora de agua y saneamiento de MSF en Gaza, dijo: “Con nuevos ataques que han resultado en cientos de mártires en sólo unos días, Israel continúa privando a los habitantes de Gaza de agua cortando la electricidad e impidiendo la entrada de combustible, que son recursos esenciales para la infraestructura hídrica, incluido el funcionamiento de las bombas”.
Y añadió: "Para aquellos que han sufrido constantes bombardeos, el sufrimiento se ve exacerbado por la crisis del agua. Muchos se ven obligados a beber agua inutilizable, mientras que otros carecen por completo de ella".
Por su parte, la coordinadora del equipo médico de Médicos Sin Fronteras en Gaza confirmó que el número de niños que padecen enfermedades de la piel es consecuencia directa de la destrucción de Gaza y del asedio impuesto.
Señaló que “al tratar a adultos y niños con heridas graves de guerra, nuestro personal está tratando a un número cada vez mayor de niños que padecen enfermedades cutáneas prevenibles como la sarna, que causa un sufrimiento severo y, en casos graves, lleva a rascarse la piel hasta sangrar, exponiéndolos a infecciones”.
Y agregó: "Esto se debe a que los niños no pueden bañarse, lo que favorece la propagación de la sarna y otras infecciones, dejando cicatrices permanentes".
A medida que la crisis humanitaria empeora en la Franja de Gaza, Médicos Sin Fronteras confirmó que en medio de los bombardeos israelíes a medida que se agota el combustible, el sistema de agua restante colapsará por completo, cortando el acceso de la gente al agua, con terribles consecuencias humanitarias para los millones que aún se encuentran dentro de Gaza.
Señaló que los heridos y muertos resultantes de los bombardeos y el acceso al agua potable afectan en gran medida las condiciones de vida y la salud de las personas. En los centros de salud de Al-Mowasalat y Khan Younis, la ictericia, la diarrea y la sarna son las afecciones más comunes que trata MSF, todas ellas derivadas de la falta de suministro de agua potable.
Médicos Sin Fronteras explicó que incluso antes de la reanudación de la guerra en Gaza, a principios de la semana pasada, que resultó en el colapso de la tregua de dos meses, Israel había prohibido la entrada de toda ayuda a Gaza. Como resultado, los esfuerzos humanitarios para rehabilitar el sistema de agua de Gaza siguen enfrentándose a importantes obstáculos y retrasos debido al sistema dual de aprobación previa impuesto por las autoridades israelíes.
Dijo que muchos suministros de agua y saneamiento requieren aprobación previa, incluido el cloro, repuestos básicos para unidades de desalinización, generadores, bombas de pozo y tanques de agua.
“Las restricciones impuestas por las autoridades israelíes han hecho casi imposible reconstruir un sistema de agua que funcione”, dijo Paula Navarro. "La producción de agua depende de la energía, pero no se permitieron nuevos generadores con una potencia de más de 30 kilovatios. Nos vemos obligados a 'instalar' los generadores utilizando repuestos de otros generadores".
Médicos Sin Fronteras renovó su llamamiento a Israel para que levante el inhumano asedio impuesto a Gaza, cumpla con el derecho internacional humanitario y sus deberes como potencia ocupante y garantice que la ayuda llegue a la Franja sin obstáculos.