Gaza-Saba:
Las panaderías del norte al sur de la Franja de Gaza han sido completamente cerradas después de que se agotaron los suministros de harina, una escena que refleja la magnitud de la catástrofe humanitaria que enfrenta el enclave asediado, que está asediado por el enemigo israelí, que pretende perpetuar el genocidio.
En medio del empeoramiento de las condiciones de vida, la Organización Mundial de la Salud declaró que las condiciones en Gaza son "trágicas" en todo el sentido de la palabra, señalando que la falta de productos básicos, en particular harina, amenaza la seguridad alimentaria de más de dos millones de personas.
Esta crisis llega en un momento crítico, ya que los hospitales de la Franja de Gaza también sufren una grave escasez de medicamentos y suministros médicos, en medio de advertencias de un colapso total de los servicios humanitarios si estas condiciones persisten sin una intervención urgente de la comunidad internacional.
Con el bloqueo en curso y el cierre total de los cruces, la catástrofe humanitaria en la Franja de Gaza está empeorando, ya que las panaderías, una fuente vital de alimentos para la población, están cesando sus operaciones, lo que amenaza la vida de los civiles.
El jefe de la Asociación de Panaderías de Gaza, Abdel Nasser Al-Ajrami, confirmó que la Franja está siendo testigo de una "verdadera guerra de hambre", con muchas panaderías cerrando debido al agotamiento de suministros esenciales, especialmente harina, diésel, levadura y gas para cocinar, lo que lleva a una parálisis casi total en la producción de pan.
En una declaración a la Agencia de Noticias Shehab, Al-Ajrami señaló que "el cierre y el bloqueo impuesto por el enemigo israelí a los bienes es la principal causa de esta crisis", y agregó que las condiciones de vida en la Franja de Gaza se han deteriorado gravemente, y los ciudadanos sufren el peso de la guerra y las privaciones, en medio de la incapacidad de las autoridades pertinentes para intervenir.
En la Franja de Gaza se consumen diariamente aproximadamente 450 toneladas de harina y las panaderías cubren el 50% de las necesidades de la población. Con una parte importante de las 70 panaderías automatizadas (de un total de 140) destruidas, especialmente en el norte de la Franja de Gaza, la crisis se está profundizando, con pérdidas estimadas en millones de dólares.
Por su parte, Amjad Shawa, Director General de la Red de ONG en la Franja de Gaza, advirtió de un desastre humanitario inminente en la Franja después de que los suministros de harina asignados a las panaderías apoyadas por el Programa Mundial de Alimentos se agotaran por completo.
Al-Shawa explicó a la Agencia de Noticias Shehab que estas panaderías cubrían aproximadamente el 30% de las necesidades de los distintos refugios, mientras que las cantidades restantes se distribuían a los residentes, que dependen en gran medida de la ayuda humanitaria a la luz de la actual agresión y el bloqueo israelí.
Señaló que la escasez de harina amenaza con detener la preparación de comidas calientes en organizaciones benéficas y comedores comunitarios, lo que podría conducir a un deterioro acelerado de la situación humanitaria ya "deteriorada", como él lo expresó. Advirtió que el cierre de las panaderías hundiría al sector en la hambruna, dada la pérdida de productos básicos de vida.
La situación humanitaria en la Franja de Gaza se está deteriorando hasta llegar a una catástrofe, lo que requiere una intervención internacional urgente para salvar a los civiles abriendo los cruces y asegurando el ingreso de alimentos y suministros médicos antes de que sea demasiado tarde.
