Sanaá - Saba:
Tras expirar el plazo fijado por los dirigentes de Sanaá para que los mediadores presionen al enemigo israelí a fin de que permita la entrada de ayuda a la Franja de Gaza, que sufre una catástrofe humanitaria sin precedentes desde hace más de 15 meses debido a la agresión sionista, las fuerzas armadas anunciaron la reanudación de la prohibición de entrada a todos los barcos israelíes.
Las fuerzas armadas confirmaron que la prohibición entraría en vigor desde el momento en que se anunció la declaración el martes por la noche, prohibiendo a todos los buques israelíes pasar por la zona operativa designada del Mar Rojo, el Mar Arábigo, el Estrecho de Bab al-Mandab y el Golfo de Adén. Esto ocurrió después de que expirara el plazo dado por el líder de la revolución a los mediadores, quienes no lograron persuadir al enemigo israelí para que reabriera los cruces y permitiera la entrada de ayuda a la Franja de Gaza.
Con la prohibición declarada, cualquier buque israelí que intente cruzar las áreas operativas designadas quedará expuesto a ser atacado, especialmente porque los mediadores no han podido llegar a una solución que abra los cruces y permita el ingreso de ayuda a la zona.
La decisión de Sanaá es la culminación de un enfoque coherente y de principios para apoyar la causa palestina y una determinación de adoptar medidas concretas para impedir el continuo bloqueo de Gaza, en particular dada la intransigencia del enemigo sionista y su insistencia en estrangular la Franja e impedir que llegue a ella la ayuda.
En su discurso anteanoche, el líder de la revolución, el Señor Abdulmalik Badr al-Din al-Houthi, reiteró que las medidas militares yemenítas entrarían en vigor inmediatamente después del vencimiento del plazo si los cruces no se abrían a la ayuda. También afirmó que las fuerzas armadas yemenítas estaban plenamente preparadas para llevar a cabo operaciones contra el enemigo sionista si el asedio y el cierre de los cruces continuaban.
El plazo de cuatro días impuesto por los líderes demuestra su determinación ante los mediadores y el mundo entero. Refleja también una postura firme para obligar a la entidad sionista a cumplir el acuerdo de alto el fuego y abrir los cruces a la ayuda humanitaria sin restricciones ni condiciones.
Las advertencias del líder de la Revolución se produjeron en medio de la continua obstrucción por parte de la ocupación a la implementación del acuerdo y sus intentos de imponer una nueva realidad en la Franja de Gaza y los territorios palestinos ocupados endureciendo el bloqueo y obstruyendo la entrega de ayuda.
Los observadores creen que la reanudación de las operaciones navales yemeníes podría tener un impacto directo en la economía israelí, ya agotada por la prolongada guerra abierta. Esto es especialmente cierto dada la paralización y las pérdidas infligidas a los puertos ocupados por el enemigo. Esto podría generar pérdidas económicas que duplican las que ha sufrido la entidad desde el inicio de la agresión a Gaza.
A pesar del compromiso de la resistencia palestina con los términos de la primera fase del acuerdo, incluida la liberación de los prisioneros israelíes, la ocupación sigue retrasando el cumplimiento de sus obligaciones y continúa su escalada militar y su asedio, una medida que los observadores consideran un intento de imponer una política de desplazamiento forzado a la población de Gaza.
Mientras el sufrimiento de los residentes de la Franja de Gaza continúa aumentando, la comunidad internacional y los regímenes árabes siguen guardando silencio, eludiendo responsabilidades y sin adoptar medidas prácticas para detener las violaciones y los ataques israelíes o para imponer una presión real sobre la ocupación sionista para que cumpla con el derecho internacional.
Aunque las naciones islámicas y árabes poseen muchos medios para tomar acciones prácticas en apoyo del pueblo palestino, como enfatizó el Líder de la Revolución, todavía se limitan a unas pocas declaraciones tímidas y pronunciamientos mediáticos ineficaces, mientras que la situación actual exige acciones serias y efectivas.
El Líder de la Revolución señaló que «todos los árabes y musulmanes pueden adoptar diversas posturas prácticas a nivel político, económico y en todos los niveles, brindando mayor apoyo al pueblo palestino mediante medidas de apoyo y prácticas. Emitir simplemente declaraciones con deseos, llamados y apelaciones no sirve de nada en la realidad y no produce resultados reales ante la flagrante arremetida estadounidense e israelí».
La posición oficial y popular yemeníta afirma que cualquier escalada israelí en Gaza será respondida con firmes medidas disuasorias, basadas en la ecuación "asedio con asedio", que ha demostrado su eficacia para presionar a la ocupación y obligarla a retirarse en más de una ocasión anterior.
Esta intransigencia sionista llega en un momento en que la región, particularmente Siria, está siendo testigo de rápidos acontecimientos que revelan las maniobras estadounidenses y occidentales para encender más conflictos, que sólo sirven al proyecto sionista, que no perdonará a nadie en la región.
Según los observadores, la continua escalada en la Franja de Gaza, sumada a la dilación de Israel en la implementación de los acuerdos, está devolviendo la situación al punto de partida y aumentando la probabilidad de que la confrontación militar se intensifique y se amplíe para incluir otras áreas de la región.
Dada la persistente intransigencia de Israel y su negativa a responder a las demandas de ayuda para entrar en Gaza, se esperaba que las fuerzas armadas yemenítas anunciaran la reanudación de la prohibición de navegación a los buques israelíes. Esta medida recaería sobre el enemigo israelí y sus partidarios.
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