Sana'a - Saba: Escrito por: Editor político

Las fuerzas del mal en el mundo, encabezadas por Estados Unidos y la entidad sionista, han mostrado sus colmillos para destruir los cimientos de la vida en el Medio Oriente, particularmente en el frente militar. Esto no surgió de la nada, sino para poner en práctica un plan sistemático previamente formulado bajo el nombre de "El Nuevo Medio Oriente".

El nuevo proyecto colonial para Oriente Medio fue recibido con absoluto rechazo en la región árabe cuando se anunció. En ese momento, Estados Unidos, Israel y el resto de las potencias coloniales se dieron cuenta de que la implementación de ese proyecto enfrentaría grandes dificultades mientras los países del Medio Oriente poseyeran importantes capacidades militares y económicas, como Egipto, Irak, Siria, Irán y los estados árabes del Golfo. Por eso se puso en marcha un plan para destruir las capacidades militares de estos países y controlar económicamente a los estados del Golfo después de vaciar sus sistemas políticos.

Al final, los ejércitos iraquí y sirio fueron destruidos, el ejército egipcio fue neutralizado y las capacidades militares de Hezbolá fueron destruidas. El asunto llegó incluso a la cabeza del eje de la resistencia, "Irán", que actualmente está siendo sometido a la agresión militar sionista con diversos tipos de armas, en medio del completo silencio de todos los países árabes e islámicos, salvo tímidas declaraciones que ni avanzan ni retrasan, con la excepción de la honorable posición de la República del Yemen, que está lloviendo una serie de misiles y drones sobre la entidad sionista.

Cualquiera que ignore el peligro del proyecto colonial sionista-estadounidense sufrirá daños, tarde o temprano. El plan colonial no es sólo destruir ejércitos, sino también controlar los recursos económicos y petroleros de esos países, especialmente de los del Golfo, que ahora están en brazos de Estados Unidos, que ejerce sobre ellos una política de chantaje financiero, mientras ellos se muestran sumisos y carecen de capacidad para negarse.

Estados Unidos, Israel y otras potencias coloniales reconocen la gran importancia geopolítica de la región árabe, la riqueza de su subsuelo y su densa población, ideal para mano de obra barata o incluso mercados para productos occidentales. Por ello, estos países han trabajado para crear un nuevo proyecto en Oriente Medio destinado a reforzar su control sobre esta importante región del mundo, y se esforzarán por lograrlo a través de diversos medios.

Ahora, se puede decir que se encuentra en las etapas finales de implementación del Nuevo Proyecto del Medio Oriente, que consiste en destruir el poder militar y nuclear de Irán y controlar su riqueza petrolera.

Lo lamentable es que los gobernantes árabes entierran la cabeza en la arena como avestruces, como si lo que ocurre en la región no les preocupara. Sin embargo, el daño finalmente recaerá sobre todos si los gobernantes árabes no despiertan de su letargo y se dan cuenta de las conspiraciones que se desarrollan a su alrededor.