Gaza-Saba:
El miembro del Buró Político del Movimiento de Resistencia Islámica "Hamas", Izzat al-Rishq, confirmó que la decisión del enemigo sionista de cortar la electricidad a Gaza, después de privarla de alimentos, medicinas y agua, en un intento desesperado de presionar al pueblo palestino y su resistencia, es una política de chantaje barata e inaceptable.
Al-Rishq dijo en un comunicado de prensa hoy, domingo, que cortar la electricidad, cerrar los cruces, detener la ayuda, el socorro y el combustible y dejar morir de hambre al pueblo palestino constituye un castigo colectivo y un crimen de guerra en toda regla.
Agregó que las prácticas del enemigo constituyen una flagrante violación de los acuerdos firmados y una transgresión de todas las leyes y normas humanitarias, en una nueva confirmación de que el enemigo no respeta sus obligaciones.
Señaló que el primer ministro enemigo, Benjamín Netanyahu, busca perturbar el acuerdo que el mundo ha presenciado, tratando de imponer una nueva hoja de ruta que sirva a sus intereses personales a expensas de las vidas de los prisioneros del enemigo y sin tener en cuenta las demandas de sus familias.
Al-Rashq advirtió al enemigo que no continúen estos crímenes, subrayando que el pueblo palestino y su resistencia no se someterán a estas presiones y seguirán firmes hasta lograr la libertad y la victoria.
Subrayó que "no hay más remedio que comprometerse a aplicar los términos del acuerdo e iniciar las negociaciones para la segunda fase. Cualquier intento de postergarlo es una pérdida de tiempo y una manipulación del destino de los presos".
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